claves organizacio siglo xxi

Claves para una organización del siglo XXI

Son tantos los cambios y la forma en que se han sucedido durante los últimos años, que el mundo está buscando incansablemente innovar y construir organizaciones para esta nueva época.

 

Sin embargo, ¿Cuáles son las claves para una organización del siglo XXI?

 

En HPI International nos estamos tomando muy en serio este tipo de preguntas y creemos que esto requiere una nueva mirada y además, como cada nueva innovación, arriesgarse a implementar nuevos modelos que ayuden a reconocer lo que funciona y lo que no.

 

Si bien esto está en constante construcción y seguirá cambiando, quisiera compartir contigo lo que estamos haciendo y la visión que tenemos de este futuro que ya ha llegado.

 

Flexibilidad y adaptabilidad bidireccionales

Desde hace años que se habla de la necesidad de más flexibilidad y de desarrollar estas habilidades en los colaboradores, pero debemos darle un entendimiento más amplio a esta idea.

 

Para este nuevo siglo necesitamos personas flexibles y adaptables, pero también organizaciones, liderazgos y entornos que se adapten al colaborador.

 

Desde ofrecer flexibilidad horaria y geográfica, hasta poder experimentar en diferentes posiciones y desafíos dentro de la organización.

 

Ajustar el trabajo al momento de la vida del colaborador y no sólo pedirle al empleado que ajuste su vida personal y familiar a lo que el trabajo quisiera.

 

Serán aquellas organizaciones más flexibles y adaptativas bidireccionalmente las que mejor podrán hacer frente a los desafíos del nuevo siglo.

 

Trabajo híbrido y global

La pandemia nos mostró que podemos operar, en muchísimas organizaciones, de forma totalmente remota, pero también dejó en evidencia la enorme necesidad que tenemos de socializar e interactuar con otras personas, al punto que los problemas de salud mental se dispararon enormemente.

 

El trabajo híbrido permite, de mejor manera, compatibilizar ambas cosas, entregando más y mejores alternativas para cubrir las necesidades emocionales, psicológicas y productivas, tanto de los colaboradores como también de los colaborares.

Sin embargo, esto irá más allá, avanzando a modelos híbridos y globales, es decir, la posibilidad de participar de entornos presenciales desde diferentes lugares del mundo, haciendo más cerca la posibilidad de tener experiencias internacionales, pasantías culturales o compatibilizar proyectos personales con un trabajo dinámico, cercano y con fuerte cultura.

Una cultura que come procesos

Como dice el famoso dicho: “la cultura come procesos” haciendo alusión a que ésta siempre es más poderosa que los procedimientos que podamos crear en una organización.

Por esa razón, las empresas deben invertir tiempo y recursos en construir una cultura fuerte que les ayude a cumplir con su misión y visión, en vez de seguir haciendo grandes esfuerzos en la estandarización de procesos.

Si la cultura es la correcta para esa institución y su actividad, los procesos surgirán de manera más natural, como consecuencia de sus valores, creencias y competencias individuales y colectivas.

Las empresas de este nuevo siglo tienen una “forma de ser” poderosa. No tienen sólo una planificación estratégica, sino que logran convertirse en verdaderas causas de las cuales poder enamorarse, adherir y comprometerse profundamente.

Estas son solo algunas claves para organizaciones del siglo XXI y son algunos de los pilares que estamos implementando y viviendo directamente al interior de HPI International. Pero eso no es todo.

Temas como diversas e inclusión, innovación como core de negocio, construcción de negocios en redes de colaboración internacional, entre otras, creo que son y serán ejes para este nuevo tiempo que nos tocará protagonizar.

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Episodio 65: Las 5 tendencias en capacitación

Necesitamos aprender cada día, mantenernos al tanto y preparados, desarrollar nuevas habilidades y ponerlas al servicio de nuestros objetivos. Sabemos que el entorno cambia de forma rápida y que requiere una adaptación quizás nunca antes vista, también sabemos que existe tanto acceso a información que ahora el problema no es “saber” sino que “nutrirnos” de información que sea confiable.

El life-long learning es un concepto que ha llegado para quedarse y que está cambiando la forma en que entendemos el aprendizaje al interior del mundo del trabajo y también, modifica las estrategias para estar competentes y desarrollando nuevas habilidades. Justamente de eso quiero compartirte en este nuevo episodio de “Un día a la vez”, en que te cuento más sobre las 5 tendencias en capacitación que están ingresando al mundo del aprendizaje continuo en el trabajo.

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Cómo poner fin al gasto en capacitación

Llevo más de una década vinculado al mundo de la educación, capacitación y asesoramiento de personas, equipos y organizaciones. Desde roles dentro de multinacionales, desde el sector público o como empresario en este segmento he visto cómo muchas cosas han cambiado sin tocar algunos elementos esenciales en la forma en que se lleva esto adelante y que es realmente una pérdida de esfuerzo y recursos (tiempo y dinero) a manos llenas. Aunque algunos podrán decirme quienes “ganan” con esto, personalmente creo que casi nadie lo hace y por ello debemos aprender cómo poner fin al gasto en capacitación, o al menos, cambiar la lógica para que sea realmente una inversión. 

Siempre hablamos de que el centro de la organización son sus personas, que sin ellas nada sería posible y que por esa gran razón es que necesitamos cuidar el bienestar y promover la formación continua que permita que los colaboradores estén preparados para el mundo en el que estamos y los desafíos que enfrentamos en la actualidad. Hasta ahí estoy de acuerdo en casi todo lo del discurso instalado. 

Sin embargo, qué hace que los recursos puestos en capacitación sean realmente una inversión y no un gasto. Esencialmente, cuando hablamos de invertir nos referimos a disponer recursos de tiempo, materiales, económicos, etc, con la finalidad de obtener una rentabilidad, es decir, generar más de lo que se tenía antes del acto de invertir. Si llevamos esto al mundo de la capacitación, tenemos que comprender que la inversión sería solo justificable en los siguientes esenarios:

  • El acto de capacitar logró una mejora en las habilidades y competencias de los colaboradores que tiene una repercusión en aquellos indicadores importantes para la organización, o,
  • Que el acto de invertir permita generar un activo favorable para la organización. 

Acá me quiero explayar un poco más. Si tenemos colaboradores más competentes, éstos pueden ser considerados como “un activo” que ayuda a la empresa a lograr sus objetivos. No obstante, las personas se cambian de trabajo, renuncian, se les despide, etc. Por lo tanto, es una inversión (la capacitación) que se va con el colaborador, teniendo la empresa que volver a invertir una y otra vez en formar a los nuevos y a los antiguos cada vez que se detectan brechas importantes (¿quién no tiene brechas de desarrollo?, nadie)

¿Pero si en vez de pagar cada vez por una capacitación, dicho presupuesto fuera en un activo, es decir, en un producto “capacitador” que fuera de uso permanente para la organización? entonces lo que ocurriría que con ese prespuesto que se va a la basura muchas veces al interior de las empresas, cada año estarían poblando de nuevos programas formativos y cápsulas de conocimiento interno ese “Netflix” corporativo, base de gestión del conocimiento. Ya no tendrían que volver a pagar cuando quieran un curso para una persona o un grupo, sino que eso ya lo compraron, es un activo de formación continua. En eso pienso cuando digo cómo poner fin al gasto en capacitación. 

Pero esto que es tan sencillo ¿por qué no se hace? creo que son varias razones:

  • Las empresas cuentan con presupuestos anuales que administran muchas veces en la lógica de “gastar los montos asignados” en vez de invertir dichos montos en capacitación constante. 
  • Los proveedores prefieren que cada vez que haya una necesidad les vuelvan a pagar y así hacer caja para su mes a mes. 
  • Los incentivos fiscales, en el caso de Chile, no favorecen la generación de capacidades internas, sino el uso de franquicias tributarias (pagadas por todos los contribuyentes), teniendo una mirada transaccional y a corto plazo, en vez de una real inversión en capital humano. 

Esto hay que ponerle fin. Las empresas tiene que poner fin al gasto en capacitación y ser inversionistas de capital humano. Los proveedores debemos construir valor sostenido y no transaccional y, entre todos, debemos contribuir a un mercado del trabajo cada vez más y mejor preparado para los desafíos del mundo actual. 

Nosotros en LearninGroup estamos haciendo eso, y hemos lanzado un Join Venture con otras empresas del sector con una mirada realmente win-win, porque esto no requiere más dinero, sino otra mirada y más generosidad en cómo se hacen las cosas, ingenio e innovación. Por eso hemos construido plataformas de formación corporativa de último nivel, contenidos personalizados para cada entidad con sus propios conocimiento, hemos formado a sus expertos para que le enseñen a otras personas, pero de forma permanente por medio de la tecnología disponible 24/7, hemos incorporado sistemas de evaluación de competencias acreditados internacionalmente, evaluaciones de inteligencia emocional y perfiles de comportamiento DISC, estamos trabajando en formar y medir el fit cultural entre los colaboradores y las organizaciones, y todo esto con integración tecnológica que permite hacer gestión, tomar decisiones y ser realmente inversores en capacidades humanas y no aquellos llamadas a gastarse la plata para cumplir un presupuesto muchas veces sin sentido. 

Si quieres ser parte de esta forma de hacer las cosas y llevar a tu empresa a que aprenda cómo poner fin al gasto en capacitación para invertir en desarrollo sostenible para las personas e instituciones, entonces escríbeme y conversemos. Te contaré algo ÚNICO.

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3 claves para el liderazgo efectivo

Liderar es algo que muchas personas desean lograr, sin embargo, el gran desafío es saber cómo poder lograr esas habilidades que distinguen a líderes efectivos de aquellos que no lo son.

Existen diferentes formas de ver esto, pero en este nuevo episodio de mi programa de vídeo llamado “Hablemos de”, quiero compartir contigo 3 claves para el liderazgo efectivo que espero que puedan servir de guía para tu crecimiento continuo.

Recuerda que puedes encontrar más contenidos en vídeo en mi canal de youtube y también en mi sitio web, cada martes y jueves.

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3 claves para el desarrollo de personas y evitar el mero estímulo

Cuando apostamos por desarrollarnos muchas veces terminamos viviendo experiencias de mero estímulo, es decir, con foco en las emociones, nuestra motivación y sentirnos de cierta manera. El problema de esto es que las emociones pasan, sin embargo, cuando invertimos en nuestro desarrollo, aprendiendo nuevas cosas y construyendo nuevas competencias, entonces sí estamos más y mejor preparados para enfrentar desafíos concretos en nuestro presente y futuro. 

Por lo anterior, es que quiero compartir contigo estas tres claves que creo que te pueden ayudar a elegir por tu desarrollo personal y tener cuidado con aquellas experiencias o personas que solo ofrecen estimulación (claro que será un lindo momento, pero seguirás siendo la misma persona que antes). 

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Liderazgo en época millenials

Este viernes 8 de noviembre de 2019 inició el nuevo programa de conversación que he creado en Smart Coach, el que he llamado #CambiarHaceBien. Luego de haber realizado desde 2018 hasta septiembre de este año el programa radial “Conversa con Sentido”, ahora este nuevo espacio de conversación nos invita a aprender, reflexionar y construir distintas miradas con la necesidad de enfrentar y liderar el cambio.
 
En este primer capítulo conversé con el psicólogo y especialista en liderazgo y storytelling, César Castro, para hablar sobre cómo liderar en esta época millenials. Puedes ver esta conversación en youtube a continuación y también en podcast vía Spotify.