Sabemos que estamos en un mundo repletos de cambios y nuevos desafíos. Metidos en medio de esta pandemia de Covid-19, una transformación tecnológica nunca antes vista, problemas sociales, aumento de la cesantía, brechas en las habilidades de las personas para adaptarse a estos contextos, una situación de salud mental que empeora, cambios en las tendencias políticas en nuestro continente, son solo algunas aristas de un mundo que deja en nosotros y nuestra vida diaria una cuota enorme de incertidumbre.
Sabemos que la idea de tener las cosas bajo control es una ilusión en casi todos los aspectos, sin embargo, esto no cambia el hecho de que a mayor incertidumbre comenzamos a experimentar más ansiedad y que ésta abre la puerta a la angustia e incluso a cuadros como la depresión.
Podemos quedarnos esperando que “allá afuera” otras personas (especialistas, políticos o familiares) tomen decisiones y guíen nuestros pasos, sin embargo, esto nos quita poder y nos hace perder capacidades frente a un mundo que no dejará de ser incierto y complejo. Todo esto me hace pensar que es fundamental que tengamos la capacidad de construir opciones personales frente la incertidumbre; alternativas que nos ayuden a tener planes diversos y flexibles.
La flexibilidad es fundamental para la adaptación y ésta es clave para poder lograr lo que queremos, promover el autocuidado y lograr navegar en este contexto y en los que vendrán, sin embargo, no hay flexibilidad si no contamos con “el espacio” para poder movernos.
Pero ¿cómo construir estas opciones personales frente la incertidumbre?. Antes de ver algunas ideas de cómo generar estas alternativas, me parece fundamental pensar qué queremos lograr o conservar en nuestra vida, áreas como salud, familia, recursos materiales, esparcimiento o capacidad de aprender y alimentar nuestras inquietudes intelectuales y emocionales creo que son claves para pensar una vida que tenga sentido y niveles de satisfacción personal que hagan de nuestro paso por este mundo algo que queramos experimentar. En este sentido necesitamos incorporar conocimientos y competencias para mantenernos competentes en nuestras áreas de desarrollo, mirar el mundo de la tecnología, innovación y la creación de valor nos ayudan a optar de mejor forma a un desarrollo personal y profesional con más opciones en el mundo actual. Comprender que venimos de un lugar pero que no estamos anclado a él también nos ayuda a levantar la mirada para buscar e incluso movernos a sitios donde podamos estar mejor y conseguir la calidad de vida que queremos y en el mundo hay muchos sitios que seguramente te podrán brindar esos proyectos que tienes. Establecer redes de contacto y apoyo más allá de tu área de trabajo y geografía también te ayuda a estar en mejores condiciones de generar nuevas opciones personales frente la incertidumbre y con ello tener la real alternativa de construir caminos diversos.
Si estamos en un mundo que cambia y que deja tanta incertidumbre sobre nuestra mesa, entonces, me parece, debemos recoger el desafío de volvernos más flexibles en el más amplio sentido. Nuevos idiomas, nuevos lugares, nuevos amigos y redes, nuevas habilidades personales y profesionales, nuevos ingresos económicos, etc, todo en post de tener real chance de elegir y no terminar comiendo inestabilidad o la espera que otros creen ese mundo donde nosotros y los nuestros no sabemos si tendremos el espacio que anhelamos y merecemos.
Y tú, ¿qué vas a hacer?